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sábado, 9 de febrero de 2013

Desde mi sillón (tercera parte)

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Conseguir sangre será lo difícil, ya que las autoridades están muy atentas, no tienen pistas sobre los asesinatos pues trate siempre y hacerlo diferente, hoy tengo que volverlo a hacer pues estoy muy cerca de saber que es lo que esta pasando en realidad, tengo varias teorías, pero aún no las puedo comprobar, regresare y terminare esto de una vez.

Estoy listo para salir a buscar mi siguiente víctima, pero no se a donde ir, si la ciencia quiere que triunfe que me de una señal. Y la señal llego, voy saliendo de mi departamento y escucho como pelean la pareja del piso de arriba, el la golpeo y salió enojado, esa es mi oportunidad, nadie sospechara de mi, el novio parecerá culpable y me dará tiempo de seguir mi investigación.

No se cuál sea la razón pero esta vez fui muy violento, no me sorprende ya que la magia negra es así, no podía esperar flores y colores, pero en fin, ya tengo todo y estoy listo para descubrir el misterio.

Pasa exactamente lo mismo, todo se nubla y despierto en el mismo sillón junto a mi, mi paciente y nadie nos puede notar, veo a mi grupo de amigos y en ese instante noto algo raro, hay algo diferente, todo esta exactamente como lo deje en mi último viaje, como si todo se hubiera detenido, recuerdo en que se quedo la plática y donde tenía que estar yo, todos mis amigos están inmóviles, quietos como si me estuvieran esperando, que raro, no comprendo.

Corro al mismo lugar donde estaba en mi último viaje y como si todo fuera planeado por un gran bromista, en el momento que me siento en ese escalón frente a la dirección de la escuela, donde estaba la última vez, todo se acciona, todo despierta, como si hubiera accionado el botón de play. Comienza la plática, todo normal, como si no hubiera pasado el tiempo y como si estos días no hubieran pasado.

Soy feliz, pero noto algo, la actividad de mi paciente en el sillón ha cambiado, esta activo, mueve todos los dedos a la vez, menos, el pulgar derecho que sospecho que es el dedo que lo representa a el, ahí es donde reacciono y me doy cuenta del error, yo no tengo dedo, sobro, cada uno de nuestros 9 amigos y ya pertenezco a este mundo.

Tengo miedo, sudo, pero continuo con la misma plática, como si no hubiera pasado nada, se que puedo perder la vida en este viaje, por que algo me dice desde mi interior que mi paciente se dio cuenta de mi. Ahora lo confirmo, mi paciente me pide que lo acompañe a comer, pues llevamos horas de platica, nadie sospecha nada, ni opina nada, de hecho la plática sigue normal, no puedo esconder mi nerviosismo pero accedo y me alejó con el.

Ni siquiera llegamos a la cafetería y me hace entrar a un salón de su escuela, obscuro y frío, supongo que es un laboratorio, pues no hay sillas ni mesas, sólo planchas médicas y un terrible aroma a químicos, como los que manejamos en el hospital. Cierra la puerta y se acerca a mi, la verdad tengo miedo, ¿qué pasaría si muero en sus manos aquí? Quiero pensar que también moriré en el mundo real, que ya no despertare y que tampoco existiré aquí.

No hay sensación más terrible que la duda y miedo o sentir escalofríos y vacío en el estómago te avisan que algo terrible esta por pasar, cuando coloca sus manos en mis hombros, mirándome seriamente y sin parpadear, todas esas sensaciones odiosas se van, me siento en confianza y no hago nada, mientras abre su boca para decirme algo

- ¿quieres quedarte aquí con nosotros para siempre? -

No digo nada, el sólo sonríe y me pide regresar, tomamos nuestros mismos lugares en el grupo y continúa la plática, sin tomar en cuenta esa plática con mi paciente, disfruto el tiempo con mis amigos y amigas, reímos, bromeamos y nos contamos muchas cosas, así se pasa el tiempo, así corre el tiempo de calidad, con una sonrisa en el rostro y compañía de calidad. Hasta qué reacciono y me doy cuenta de que me siento mal y necesito regresar, me siento con miedo de morir, por esa razón voy a regresar a mi cuerpo y en el instante que decido alzar la voz y despedirme, mi paciente habla y le pide a una de nuestras amigas que lo acompañe, nadie dice nada, incluso su novia le da un beso para el "camino" como lo nombra ella y mi paciente se retira con nuestra amiga, se tardan varios minutos y nadie dice nada, la plática continúa y entre bromas olvido mi malestar y nadie nota el tiempo de tardanza de mi amigo.

Mi paciente llega y aterrorizado me doy cuenta que regresa sólo, pero eso no me hizo sentir helada mi sangre, lo que me dejo sin respiración fueron sus manos, llenas de sangre, sus ropas salpicadas de color rojo y su mirada obscura y tétrica me dicen que ya no hay salida.

Me despido tembloroso y tartamudo, nadie noto la pérdida de nuestra amiga y camino a mi sillón donde noto entre lo difuso de mi mirada que ahora ya no se mueven dos dedos, con lo poco de energía que me queda regreso al sillón y despierto lleno de sangre, las mismas manchas que tenía mi paciente, no comprendo nada y me retiro quiero dormir.

QUINTO VIAJE 31 DE OCTUBRE

Es temprano, todavía no sale el sol y ya no puedo dormir, estoy muy pensativo y me doy cuenta que cada vez estoy más lejos de mi objetivo médico, pero algo me inquieta, tengo miedo y tengo que terminar con esto, regresare una vez más y terminare con todo, lo asesinare y terminare con esta pesadilla que sólo me ha dado sufrimiento.

Corro al hospital y me decido a terminar con todo, busco al paciente más viejo del hospital, lleva más de 50 años aquí y nada me detiene para obtener el ingrediente más difícil de conseguir, no me tomo más de un minuto realizar el rito y estoy de nuevo en la escuela en medio del patio, todo sigue detenido como la vez pasada, me levanto del sillón y camino a mi lugar en las escaleras. Estoy dispuesto a tomar mi lugar y que la plática se reanude, sin pensarlo tomare su cuello con mis manos y presionare con toda mi fuerza, estoy decidido a terminar con todo y por fin me arme de valor.

Me siento entre mis amigos y la plática comienza de nuevo, estoy listo para asesinarlo y terminar con todo, pero la plática me abraza y reímos y reímos y los brazos de mi paciente me abrazan, siento cariño y amistad, otra amiga me toma de la mano y sonreímos como hermanos, la novia de mi paciente hace bromas sobre mi y otra de nuestras amigas y me doy cuenta que a ella le agrada la idea de un "nosotros". No dejo de reír y me siento a gusto en esas escaleras, afuera de la dirección de esa escuela, por eso comienzo a escribir este diario, a resumir mis 5 viajes y a tratar de contarte a ti lo que he vivido, no se sí salga libre de aquí pero quiero que todo esto sea conocido y platicado.

Reímos y somos felices, comemos y somos felices, nos abrazamos y somos felices, pensamos en muchas cosas en el futuro, planeamos viajes y reímos sobre nuestras bromas y me doy cuenta que he sido atrapado, pero soy feliz, estoy dispuesto a quedarme aquí, me siento débil y cansado pero estoy dispuesto a quedarme aquí, así es como pasan las cosas cuando llega el momento indicado de que sucedan. Me quedo dormido ahí en mi lugar sentado entre mis amigos y al despertar todos seguimos felices, platicando y jugando, asistiendo a clases y saliéndonos de ellas, reímos, lloramos y vivimos la vida a plenitud, como no lo pude hacer en mi primera oportunidad, me distraigo de la plática y me doy cuenta de que el sillón ya no esta ahí, oficialmente me digo a mi mismo sin que nadie escuche mis palabras, "mi investigación llego a su fin" y continuo con la plática tan amena que tienen mis amistades.

Me siento feliz aquí, ya casi nunca me doy cuenta que estoy en la mente de mi paciente, disfruto esta segunda oportunidad y soy feliz, mis amigas y amigos me hacen sentirme querido y ya casi no recuerdo mi vida pasada, muy de vez en cuando escucho una voz en eco, como muy distante es la enfermera en jefe del hospital, que platica la historia del paciente desconocido que lleva años en el hospital y del doctor que se contagió de el y cuenta que llevan más de 50 años ahí sentados los dos sin realizar ningún movimiento, pero que si ponen atención podrán ver como mueven sus dedos muy levemente y así cuenta la historia del paciente Ismael y el doctor Jorge y de como nadie sabe que pasa por sus mentes.

Pero si encuentras este diario hazlo públicalo por favor

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